Generamos una sombra de medianoche,
tu ansiedad y deseo se entrelazan,
un abrazo, el eco de tus pensamientos,
siempre cerca, aunque el silencio hable.
¿A dónde te has ido? No puedo dormir,
en las profundidades, mi corazón se sumerge,
no dejes que el nal nos alcance,
esperaré eternamente, aunque siempre este mal.
Tus palabras, un susurro en la oscuridad,
un amor tan fuerte, en secreto guardado,
tu corazón indomable, como un viento libre,
siempre nos veremos, es el pesar del destino que creamos.
Encantamiento de horas, drogas que devoras,
días de la infancia, peleas que no nos rompen,
como un faro, estoy aquí para elevarte,
en la noche, en la mañana, siempre estaré.
Te desafío a decir que se acabó,
en la oscuridad, los errores se repiten,
renacido con tu luz del nuevo día,
siempre estaré, aunque no me encuentres jamás.
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